jueves, 3 de octubre de 2013

Ensayo sobre epistemología del conocimiento



Maite Pérez-Lozao Macías
3-0ctubre-2013

            Un conocimiento puede definirse como una secuencia de ideas en un contexto disciplinar concreto. Nuestro cerebro se reprograma de acuerdo a ellos. Se constituyen así secuencias-bloque de conocimientos que se integran en un todo definido por la suma concatenada de sus partes. Si comprendemos cada parte, cada secuencia dentro de su bloque, pero no integramos toda la secuencia, podremos alejarnos temporalmente de él  y quedarnos con partes que no significan el todo.
            Con esto quiero tranquilizar a los que, siendo aprendices de por vida y estamos recibiendo informaciones elaboradas en paquetes ya hechos, puede que tardemos en la comprensión del todo y tengamos que conformarnos, al principio,  con la comprensión de sus partes hasta que, en algún momento, encontremos la secuencia y entonces podamos decir que lo hemos entendido y, por tanto, aprendido.  
            La forma en que se ha ido construyendo el conocimiento y la forma en que se ha transmitido pueden no seguir la misma lógica. Aprender a resolver este problema es clave en el aprendizaje. El que posee el conocimiento ha tenido que pasar por un proceso similar al de su construcción para que haya anclado ese conocimiento. De la misma forma el que tiene que aprenderlo tiene que pasar exactamente por lo mismo. Aunque los ritmos de aprendizaje sean diferentes las rutas del conocimiento tienen que ser la mismas. Si no consigues la lógica del proceso te puedes perder y sentirte frustrado por no entender su mecánica. Tener confianza en que eres capaz de llegar a encontrarla es parte fundamental de la motivación. De alguna manera siempre puede haber alguien que siga el mismo proceso de  construcción del conocimiento para que te ayude a resolver el conflicto cognitivo.    
            Los docentes podemos seguir el mismo proceso de su construcción para su transmisión o intentar descubrir qué rutas o caminos diferentes eligen nuestros queridos aprendices para reconducirles por el buen camino: el de su construcción.


No hay comentarios:

Publicar un comentario