Escribo para distanciarme de la realidad, para tener una mirada más
objetiva de mi misma.
Escribo porque me nace de dentro ese impulso por compartir emociones y
sentimientos.
Escribo por mostrar esa parte interna, estética, bella o sincera, que
se enmascara en mi cuerpo.
Escribo para volver a sentir esos momentos emotivos, sensibles y auténticos
que nos asaltan por el camino y que nos definen un poco más, sin prejuicios ni
acabados por los otros.
Escribo para ocultar esos hilos que nos delatan, que nos hacen frágiles y débiles ante los demás.
Escribo para grabar mis pensamientos.
Escribo para repensar mis propias ideas, al verlas escritas parecen de
otro y así puedo volver a enunciarlas de otra manera como si tú no
las hubieras escrito.
No me gusta copiar ni que me copien.
Firmado: una mente creativa.
Muy sincero tu escrito, Maite. En realidad, como siempre.
ResponderEliminarTe sugiero que añadas a las reacciones el adjetivo EMOTIVO. Muchas veces me gustaría calificarte así pero no tengo la opción.
Un beso muy fuerte y un millón de ánimos para tu completa recuperación.
Pronto nos vemos.
Gracias Myriam, creo que es una mezcla de racionalidad y sensibilidad lo que da como resultado el "emotivo", adjetivo al que te refieres, y me alegra de que sea esa la sensación que se recibe de lo que escribo. Emocionar al posible lector y hacerle revivir esa misma sensación que tuve cuando me alumbró.
ResponderEliminarUn beso amiga, por estar siempre "conectada"