domingo, 26 de febrero de 2012

CAPITULO 2. EL DESAYUNO


Cada mañana empezaba la jornada con un suculento y maravilloso desayuno insular. Una taza de leche con gofio, como su abuela le había acostumbrado, un buen zumo de naranja y tantas tostadas como su sensación de más le perdurase en su estómago al igual que su madre hacía.
Su madre era profesora de Biología en una escuela técnica de Barcelona. Hacía mucho que no hablaban pues mantenían ciertas discrepancias por su parecido temperamento. “La danza sale de la panza”, decía su madre, pero luego añadía “hay que mantener un equilibrio entre lo que se ingiere y lo que se consume”. Rebeca siempre tenía la extraña sensación de que su madre nunca confiaría en ella.
Leía la prensa local y se divertía con cada artículo de opinión que a otros compañeros de trabajo encendían. Después en el café se reían de los insólitos comentarios y formas de entender los hechos que tenían los sujetos que escribían, desde sus blogs de opinión, o incluso los mismos periodistas ya entrenados y de afiliación sospechosa que respondían a los estereotipos donde todos nos encasillamos alguna vez por comodidad. Sin embargo, Rebeca parecía no pertenecer a ninguno en concreto y un poco a todos, lo cual la situaba en una difícil tesitura respecto a la defensa de sus modos o pareceres. 
Conservadores frente a republicanos, socialistas frente a populistas, comunistas o “rojos” frente a fascistas o “fachas”, ecologistas frente a liberales, indignados frente a políticos, y un sin fin de posturas enfrentadas que Rebeca estaba intentando organizar y definir en una aplicación antes de que se lo pidieran.
Rebeca por aquel entonces estaba redactando un informe sobre los tipos de noticias en relación con los idearios políticos. Nadie le había encargado ese trabajo lo hacía por hobby cuando quería liberarse del rutinario que le daba de comer: la empresa TECOMO de tele-comunicaciones en medios de prensa ordinarios que realizaban estudios de mercado sobre lo que interesaba a las sociedades para intentar, eso solo lo presumía ella, establecer un control del pensamiento humano y poder hacer predicciones para controlar el futuro de la humanidad.
Terminó su quinta tostada con mantequilla y mermelada de higos casera, se lavó sus dientes y salió en dirección a la Rambla de Pulido donde el tranvía la llevaría a la sede de TECOMO en La Laguna. Hacía sol, como de costumbre, pero llevaba una chaqueta de lana para combatir la humedad de La Laguna. 

sábado, 25 de febrero de 2012

UNA HISTORIA EN LA BAÑERA


CAPITULO 1. EL DESENCANTO

Allí estaba rodeada por inmaculadas paredes blancas abandonada al suave balanceo y aliviada por vigorosos chorros que salían de los flancos de su bañera. Sus pensamientos rápidamente se expandían hacia el exterior y un deseo irrefrenable de evaporarse junto con los vapores que se iban condensando en el espejo y la mampara de cristal.
            Un bote de champú barato que se había comprado en un centro comercial le sacó por un instante de sus pensamientos. Fresa pasión, pensó Rebeca, qué chorrada, a quién se le ocurrió la idea de utilizar los sabores para enamorar. Por aquel tiempo Rebeca atesoraba cuatro novios fallidos y un sin fin de conocidos con intereses comunes pero en otra onda emocional.
            Llevaba un cuarto de su vida en Canarias, destino que había elegido junto con su primer novio, a pesar de las negativas de su familia. . No podía soportar que le dirigiesen la vida. Sabía, por su profesión libre de estadista, que los condicionantes están fijos por el entorno pero lo relativo a la persona era susceptible de ser modificado .
            El timbre del teléfono y su piel arrugada le sacaron de nuevo de sus oscuros pensamientos sobre la materia oscura y los universos paralelos. Giró el mecanismo que libera el tapón de la bañera y en una danza preludio se mezclaron sus pensamientos con el elegante vórtice transparente, altivo y distante que arrastra como agujero negro todas las anteriores elucubraciones hacia un destino cíclico y casi infinito a escala humana.
            

viernes, 17 de febrero de 2012

A Tenerife



AMANECE

Amarillo tierra,
Azul de mar
Ojos verdes
Grises cabellos.

Arena negra
Roques, islotes,…
Dignas Palmeras
Savia madura.

Blancas nubes
Falsas fumarolas,
Volcanes extintos
Reflejos dorados.











jueves, 16 de febrero de 2012

miércoles, 15 de febrero de 2012

Nuestro cuerpo

Avanzar, seguir luchando, nunca cesar en el intento, recuperarse y volverse a levantar, aprender a sentir en otro cuerpo transformado por los avatares y torpezas de la vida, airoso compañero fatigado por el tiempo, indisoluble, fugaz, opaco y nada elástico, siempre cambiando de forma, de volumen, de contenido.
Caminamos erguidos, unos a continuación de otros, como inexpertos jinetes que bridas en mano intentan dirigir al educado animal que ya tiene su recorrido memorizado. Bocanadas de aire fresco y alguna que otra vianda, manteniendo las distancias, haciendo hueco a las órganos, alargando nuestras fibras, relajando todas las tensiones...

martes, 14 de febrero de 2012

LA MATERIA


Siluetas en zigzag
Estilolitos de sangre
cincelados en la pared,
Rellenos de mineral
secretos y distantes
Grabados en el tiempo,
Forjados a tiempo.



domingo, 12 de febrero de 2012

SIN IR MÁS LEJOS

Nada más hermoso que poder contemplar escenas como esta. Sin ir más lejos, desde las Teresitas, una tarde cualquiera de domingo, pero diferente. Cielo, tierra y mar, una combinación perfecta.

jueves, 9 de febrero de 2012

GEA


RAZONES PARA ESCRIBIR


Escribo para distanciarme de la realidad, para tener una mirada más objetiva de mi misma.

Escribo porque me nace de dentro ese impulso por compartir emociones y sentimientos.

Escribo por mostrar esa parte interna, estética, bella o sincera, que se enmascara en mi cuerpo.

Escribo para volver a sentir esos momentos emotivos, sensibles y auténticos que nos asaltan por el camino y que nos definen un poco más, sin prejuicios ni acabados por los otros.

Escribo para ocultar esos hilos que nos delatan, que nos hacen frágiles y débiles ante los demás.

Escribo para grabar mis pensamientos.

Escribo para repensar mis propias ideas, al verlas escritas parecen de otro y así puedo volver a enunciarlas de otra manera como si tú no las hubieras escrito.

No me gusta copiar ni que me copien. 
Firmado: una mente creativa.

martes, 7 de febrero de 2012

TU HUELLA

Fuertes aromas envuelven
 el aire que te rodea,
camuflaje perfecto,
brújula de humanos.
Buitres alados sobrevuelan,
inexorables,
impacientes,
tu apetecible figura.
Chaqueta en mano,
melena suelta,
cinturón apretado,
paisaje urbano.

domingo, 5 de febrero de 2012

LA ISLA





Toda sensación pérdida brota como una fuente, desde una sencilla hoja a un complejo papiro donde se puede leer tu propio destino, lineas paralelas y notas disonantes, colores, tenues velos y otras tantas fisuras que van abriendo y rellenándose de nueva materia mineral. Nuevos espacios se crean, fértiles terrenos a conquistar, viejas calimas prendidas adornan las islas en el oscuro océano que las abraza. 

miércoles, 1 de febrero de 2012

MISUNA



Finas líneas surcan mis ajadas estructuras queratinizadas, dibujan siluetas, trazos continuos, algunas salpicadas de pequeñísimos gránulos, protuberancias o botones, acumulados uno a uno como gotas suspendidas en un hebra de fina hierba. Obstáculos grabados con sello personal, savia viva, costra robusta que cubre los delicados tejidos que conforman mis dedos.

Me siento perdida, busco mi mano, suave, benévola, sin riscos ni deformaciones, llana, directa, elegante, sincera …, amiga; de palma ancha, para dar y recibir; gruesa, para sostener y aguantar; fuerte, para asir, coger, agarrar…, diestra, zurda o ambidiestra y maestra con la masa, lazos de comida, buñuelos de alma, pasteles de sorpresa.